martes, mayo 10

Cagados

Cuando adviertas que para producir necesitas obtener autorización de quienes no producen nada;
cuando compruebes que el dinero fluye hacia quienes trafican no bienes, sino favores;
cuando percibas que muchos se hacen ricos por el soborno y por influencias más que por el trabajo, y que las leyes no te protegen de ellos sino, por el contrario, son ellos los que están protegidos de ti;
cuando repares que la corrupción es recompensada y la honradez se convierte en un auto sacrificio, entonces podrás afirmar, sin temor a equivocarte, que tu sociedad está
condenada.


Ayn Rand, La Rebelión de Atlas, 1957.

Estado de mierda


No hay comentarios:

Publicar un comentario