Las Bestias

Les traigo un poema de un compañero-amigo que, por esas cosas de la vida y alineación planetaria, ganó el concurso literario de la U (UC). Visiten su blog: http://neologia.lacoctelera.net/

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Las Bestias


¡Helena, Helena, por tu rostro quemamos Troya!

por tu rostro, Helena, por la fiesta tibia de tu brisa en los trigales,
por el sol que se quedaba unos segundos más en la Meteora,
por la forma en que nos brillaban los escudos en el Egeo,
por el susurro de las ropas que conversaban entre ellas bajo el silencio
que eran los gritos en el foro.

Helena, y quemaríamos la tierra hasta hacerla dar lágrimas en vez de manantiales,
hasta que las flores fueran de fuego
y los olivos nos dieran frutos de sangre.
Helena, por tu rostro arrasamos sus muros hasta las cenizas,
hasta que el humo quedó oculto por los cadáveres, ¡Helena!,

matamos a tantos, bella Helena.

Y quisimos que la muerte se guardara de los que verían
las semillas que plantamos
caer del árbol que no vimos.
Quisimos fuera precio suficiente;
quisimos muerte suficiente.
Que el que ponga nombre nuevo
a las cosas que olvidemos de nombrar
cuando nuestra lengua se seque
y al fin crezca la hierba en Ilión,

que el que vea el sol tras sus hombros
en el rostro sin rostro que es su rostro en la tierra
y tenga nuestras ideas nuevamente;

para cuando seamos olvidados,
quisimos muerte suficiente,

para que ése, el hombre que ha de vivir de nuevo,
no tuviera muerte.

El libre que habría de nacer.
Matamos a tantos para él, bella Helena.
Para que no tuviera muerte.

Pero he aquí Helena
que otra vez te has alzado
y das tus pasos
y tu sombra se arroja sobre los vivos